Amigo-.

Sabes que puedes buscarme, sabes que estaré para ayudarte, sabes que te apoyo, sabes que te quiero y sabes que soy tu amiga-.

Siempre existirán cosas que nos harán dudar, está en ti, querer cambiar las dudas por algo de verdad-.

Totalmente contradictorio-.

Sentada, en un rincón de estas cuatro paredes. Miro a mí alrededor... Unos conversan, otros escriben, algunos juegan y yo... ¿Y yo?. ¿Que hago?. Trato de ver el mundo a mi manera, trato de comprender el actuar de todos. Me es algo difícil comprenderlos. Entre la música, escucho un grito... Me doy cuenta sin necesidad de mirar que es ella, la chica "superior y robustita". ¿Superior?. No lo es. Vuelvo a lo mío, trato de intentar no pensar en lo que hacen aquellas personas, pero por más que trato no puedo. En los intervalos entre canción y canción logro escuchar sus tonterías, como hablan de otros, de como se ríen por cosas tan vanas que realmente dan pena. Sería bastante egoísta de mi parte pretender cambiar su forma de ver las cosas, para sentirme bien... Pero sinceramente, no me interesa-.

Eso es todo-.

Fue bueno conocerte y todo. Pero no te conozco, descubrí que eras un extraño. ¿Qué?. No sé, espera, sólo un poco. No soy un concepto, ni tampoco una impresión sólo soy alguien que está buscando su propio pedazo de razón, no soy perfecta, nadie lo es. ¿Lo verás?. Ya sabes... Opinarás de las cosas y yo me aburriré contigo, me sentiré atrapada, y, como siempre, te diré adiós... Caminar sin ti no me cuesta nada y eso lo sabes más que bien.